PEPE SANCHEZ - LUPÍN - LA VACA AURORA (personajes de historieta argentina)

PEPE SÁNCHEZ, de Robin Wood y Carlos Vogt
Un displicente agente secreto argentino protagoniza una parodia de las series de espionaje. Pepe Sánchez es un joven espía porteño, disparatado y divertido. Algo canchero e inútil para la mayoría de las actividades, a éste personaje las cosas le salen bien por casualidad. Mientras que con filosófica resignación convive con la pesada burocracia de su departamento de inteligencia, Pepe enfrenta a temibles villanos que, por lo general, son tan incompetentes como lo son sus propios jefes. Está rodeado de hermosas mujeres que, indistintamente, lo aman o lo intentan matar. Son aventuras cómicas que tienen el sello del absurdo. Abunda en citas y guiños sobre el cine y la novela del género.


LUPIN, EL PILOTO, de Guillermo Guerrero
Lúpin, en su larga trayectoria como personaje de historieta (más de 40 años) ha vivido muchísimas aventuras y pasado por diversas etapas. A pesar de volar en un antiguo avión biplano, pero tan noble como el caballo de un gaucho, conoce los secretos de la aviación y se las arregla para salir indemne de las más riesgosas situaciones. Tiene una familia constituida por su papá y su abuelo, y varios amigos, como Adonis, Gafas y Tornillo. Es un piloto arriesgado, cuyo avión es un compañero inseparable. Las tramas son, en general, de aventuras llenas de optimismo, y a veces aparecen, en las mismas, algunos personajes históricos.


LA VACA AURORA, de Mirco Repetto
Era una vaca un tanto coqueta y caprichosa, muy amante de la música y los bombones, que vivía apaciblemente en una chacra, hasta el día en que fue vendida a Nicodemo, boticario del pueblo de Chismes, y catalogado como adivino, brujo y apasionado por todo lo que se relacionase con la magia negra. Nicodemo intentaba realizar experimentos con Aurora, pero ésta terminaba por escaparse. El ayudante de la farmacia era el eterno joven Floripondio. La vaca Aurora sabía bailar, pero no hablaba (solamente mugía). Apareció por primera vez en 1939, como un personaje secundario, en el diario socialista "La Vanguardia", dentro de la historieta "El señor Alfonso". Ya en 1940 comenzaría a protagonizar sus propias tiras, en la revista "Cara Sucia".

Fuente: www.todohistorietas.com.ar