A quien fuera el canillita por excelencia de la ciudad de Leones, mi lugar de nacimiento y residencia; él caminó y conoció sus calles como nadie por más de sesenta años.
Desde mi niñez, hasta entrada yo, en mi adultez, lo crucé infinidad de veces en los distintos confines de mi pueblo, fue toda una vida dedicada a la noble labor de llevar los periódicos y revistas a los ávidos lectores; tanta dedicación ponía en su menester, que sus clientes sabían a que hora llegaría, la puntualidad era una de sus virtudes (entre tantas); no lo detenía las inclemencias del tiempo por duras que fueran.
Mis hijos tuvieron la oportunidad de conocerlo, admirarlo y respetarlo como un símbolo de Leones.
Simón Suar, hombre introvertido, respetuoso, humilde, que al entablar conversación dejaba aflorar el ser cálido que anidaba en su interior.
Marcó generaciones que no lo olvidarán, será siempre "Simón, el Canillita Leonense" una postal de la ciudad.
Los poetas de la ciudad también le rindieron homenaje, aquí un poema de Pocha Rosales
Siempre escucho el tintineo de tus diarios
Itinerante muchacho de las calles
Moviendo tus atados de papeles
Ostentando tu amor de pregonero
Navegante de sueños de distancias
Saberes escondidos pregonaste
Ungiendo de lecturas y placeres
A cada paso de tus correrías
Rosario noticial en la mañana
Pocha Rosales
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