lunes, 31 de enero de 2011
EJERCICIO PLÁSTICO - David Alfaro Siqueiros
La mañana del 3 de diciembre de 2010, se realizó un acto en las instalaciones de la antigua Aduana Taylor, en ocasión de la instalación definitiva de la obra de David Alfaro Siqueiros, recuperada, restaurada y puesta en valor, para ofrecer al mundo el deleite de la visión de sus imágenes. El acto fue presidido por la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner.El Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, Felipe Calderón, también estuvo presente, por especial invitación de la Presidencia argentina. “Ejercicio Plástico” es una obra creada en 1933, en la que participaron los artistas argentinos Antonio Berni, Juan Carlos Castagnino, Lino Eneas Spilimbergo y el escenógrafo uruguayo Enrique Lázaro.En esa ocasión, Cristina Fernández de Kirchner pronunció un discurso de donde extraemos el siguiente párrafo:
“Señor Presidente de los Estados Unidos de México, querido amigo Felipe Calderón; amigos y amigas: hoy es un día muy especial para la Argentina, para México y también para mí, que me fijé como objetivo recuperar este magnífico “Ejercicio Plástico” del gran artista mexicano David Alfaro Siqueiros, pero no hacerlo descontextualizado, porque este es un lugar que va a ser, Felipe, cuando se termine la obra, el Museo del Bicentenario. Aquí, los argentinos vamos a conmemorar y a recordar 200 años de historia que, por esas cosas del destino y de la historia de nuestros pueblos, también son 200 años de historia mexicana.”
La gestión de la Presidenta
En el mes de junio de 2008, la Presidencia de la Nación anunció la recuperación del mural “Ejercicio Plástico”, con la participación del Gobierno de México, el que sería exhibido en la Aduana Taylor en el contexto de los festejos por el Bicentenario de la Nación Argentina. El mural del artista mexicano David Alfaro Siqueiros permaneció casi 16 años en cuatro contenedores en la localidad de San Justo.
Para la restauración, la Secretaría General de la Presidencia de la Nación firmó dos convenios de cooperación: uno con la Universidad Tecnológica Nacional, para realizar el traslado, carga, descarga y montaje de la obra hasta su lugar de emplazamiento definitivo; y otro con la Universidad Nacional de San Martín para que realice la asistencia técnica de la restauración, conservación y posterior exhibición del mural. A su vez el Gobierno Mexicano asistió en el rescate de la obra, a través de la participación de expertos del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL).
Breve Biografía de Siqueiros
Siqueiros nació en México en 1896, ya en 1914 se alistó en el ejército constitucionalista y luego viajó a Europa, donde conoció a Diego Rivera. Más tarde, escribe el manifiesto que publicó en Barcelona en 1921 donde pide “Una nueva dirección para la nueva generación de pintores y escultores americanos”. Luego vendrá el deterioro de sus relaciones con el gobierno mexicano; forma parte del Sindicato de Artistas y crea el periódico El Machete. Deja de recibir encargos a partir de 1924 y así decidió dedicarse a las actividades políticas exclusivamente. En 1930, tras varios meses en la cárcel, Siqueiros partió rumbo al exilio.
Llega el 25 de mayo de 1933 a Buenos Aires, donde realiza varias exposiciones y conoce a Natalio Botana, fundador del diario Crítica, del que recibe el encargo de decorar el sótano de su casona en Don Torcuato. Para ello organiza un grupo compuesto por los pintores argentinos Lino Enea Spilimbergo, Antonio Berni, Juan Carlos Castagnino y el escenógrafo uruguayo Enrique Lázaro, quienes colaboran en el mural “Ejercicio plástico“. Sus ideales y declaraciones provocan una reacción en los círculos gubernamentales y Siqueiros se ve obligado a salir de la Argentina.
Entre 1935 y 1936 formó, en Nueva York, una escuela llamada El Estudio Experimental de Siqueiros y de regresó a México organizó el sindicato de pintores, escultores y grabadores revolucionarios. Fallece en su país el 6 de enero de 1974.
La Obra
El mural fue pintado en 1933 en el sótano de la casona de Natalio Botana, en Don Torcuato, al norte de la Provincia de Buenos Aires. La despensa subterránea fue transformada por Siqueiros en una representación de su musa inspiradora, Blanca Luz Brum, con la colaboración de los artistas argentinos Spilimbergo, Castagnino y Berni, y el uruguayo Lázaro. El mural permaneció en poder de Botana hasta su fallecimiento en 1941. Luego la casona fue comprada por Álvaro Alsogaray, quien al encontrar la pintura muy obscena, la tapó con cal y cerró el sótano con llave.
Más tarde se vende la casa y en 1993 la obra es rescatada, para lo cual se creó un equipo que constaba de ingenieros, laboratorios químicos, herreros, carpinteros, albañiles y estudiantes de artes plásticas. Se debió sustituir los muros, la mampostería del recinto, los ladrillos, la mezcla de arena y cemento, por una estructura de metal que pudiera armarse posteriormente en módulos, para recrear la forma original del recinto. Se tuvo que desmontar toda la estructura que cubría el sótano y construir un galpón para proteger el mural del clima. Se usaron herramientas que efectuaron cortes que seccionaron en seis tramos el mural, y se sacó con una grúa las partes que luego fueron guardadas en contenedores.
Un símbolo actual
El mural consiste en figuras que están nadando alrededor del espectador en ese espacio rectangular abovedado, razón por la cual están tanto en el techo y como en el piso. Los materiales y recursos técnicos aparecen al servicio de la exploración de una nueva propuesta que implica, en sí mismo, una modernidad como acción, que hace que se abarque en la obra la clave de la problemática de esa alta modernidad. Refleja la instancia del arte político, y la pérdida de la autonomía artística se puso bajo cuestionamiento. Por otra parte, se rescata que Siqueiros entró en sintonía con Spilimbergo, Berni, Castagnino y con los estudiantes de Bellas Artes convirtiendo la obra en un paradigma del muralismo no solo por su concepción plástica espacial y por su innovadora técnica que explora una nueva propuesta como pintura dinámica, sino que constituye un verdadero testimonio de la vocación de la integración latinoamericana.
La técnica
La obra tiene una superficie total de unos doscientos metros cuadrados, y Siqueiros realizó el mural utilizando una técnica innovadora, donde combinó materiales y procedimientos antiguos con otros modernos -como el uso de la cámara fotográfica-. Además, el grupo de artistas liderado por Siqueiros hizo en este mural un gran descubrimiento, encontraron la manera de retocar el fresco con silicatos para darle mayor firmeza y durabilidad. Pero lo fundamental y más destacado en la manera de la creación de esta obra es que cambiaron el trabajo individual por el trabajo colectivo.
Fuentes:
Decreto Presidencia de la Nación Nº 1045/2003 y 1382/2007
www.cronista.com
Agencia Nacional de Noticias Telam
Texto: Ferragut Juan Pablo, Septiembre 2010
Actualización: M. Trinidad Muñoz Ibáñez, Diciembre2010
“Señor Presidente de los Estados Unidos de México, querido amigo Felipe Calderón; amigos y amigas: hoy es un día muy especial para la Argentina, para México y también para mí, que me fijé como objetivo recuperar este magnífico “Ejercicio Plástico” del gran artista mexicano David Alfaro Siqueiros, pero no hacerlo descontextualizado, porque este es un lugar que va a ser, Felipe, cuando se termine la obra, el Museo del Bicentenario. Aquí, los argentinos vamos a conmemorar y a recordar 200 años de historia que, por esas cosas del destino y de la historia de nuestros pueblos, también son 200 años de historia mexicana.”
La gestión de la Presidenta
En el mes de junio de 2008, la Presidencia de la Nación anunció la recuperación del mural “Ejercicio Plástico”, con la participación del Gobierno de México, el que sería exhibido en la Aduana Taylor en el contexto de los festejos por el Bicentenario de la Nación Argentina. El mural del artista mexicano David Alfaro Siqueiros permaneció casi 16 años en cuatro contenedores en la localidad de San Justo.
Para la restauración, la Secretaría General de la Presidencia de la Nación firmó dos convenios de cooperación: uno con la Universidad Tecnológica Nacional, para realizar el traslado, carga, descarga y montaje de la obra hasta su lugar de emplazamiento definitivo; y otro con la Universidad Nacional de San Martín para que realice la asistencia técnica de la restauración, conservación y posterior exhibición del mural. A su vez el Gobierno Mexicano asistió en el rescate de la obra, a través de la participación de expertos del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL).
Breve Biografía de Siqueiros
Siqueiros nació en México en 1896, ya en 1914 se alistó en el ejército constitucionalista y luego viajó a Europa, donde conoció a Diego Rivera. Más tarde, escribe el manifiesto que publicó en Barcelona en 1921 donde pide “Una nueva dirección para la nueva generación de pintores y escultores americanos”. Luego vendrá el deterioro de sus relaciones con el gobierno mexicano; forma parte del Sindicato de Artistas y crea el periódico El Machete. Deja de recibir encargos a partir de 1924 y así decidió dedicarse a las actividades políticas exclusivamente. En 1930, tras varios meses en la cárcel, Siqueiros partió rumbo al exilio.
Llega el 25 de mayo de 1933 a Buenos Aires, donde realiza varias exposiciones y conoce a Natalio Botana, fundador del diario Crítica, del que recibe el encargo de decorar el sótano de su casona en Don Torcuato. Para ello organiza un grupo compuesto por los pintores argentinos Lino Enea Spilimbergo, Antonio Berni, Juan Carlos Castagnino y el escenógrafo uruguayo Enrique Lázaro, quienes colaboran en el mural “Ejercicio plástico“. Sus ideales y declaraciones provocan una reacción en los círculos gubernamentales y Siqueiros se ve obligado a salir de la Argentina.
Entre 1935 y 1936 formó, en Nueva York, una escuela llamada El Estudio Experimental de Siqueiros y de regresó a México organizó el sindicato de pintores, escultores y grabadores revolucionarios. Fallece en su país el 6 de enero de 1974.
La Obra
El mural fue pintado en 1933 en el sótano de la casona de Natalio Botana, en Don Torcuato, al norte de la Provincia de Buenos Aires. La despensa subterránea fue transformada por Siqueiros en una representación de su musa inspiradora, Blanca Luz Brum, con la colaboración de los artistas argentinos Spilimbergo, Castagnino y Berni, y el uruguayo Lázaro. El mural permaneció en poder de Botana hasta su fallecimiento en 1941. Luego la casona fue comprada por Álvaro Alsogaray, quien al encontrar la pintura muy obscena, la tapó con cal y cerró el sótano con llave.
Más tarde se vende la casa y en 1993 la obra es rescatada, para lo cual se creó un equipo que constaba de ingenieros, laboratorios químicos, herreros, carpinteros, albañiles y estudiantes de artes plásticas. Se debió sustituir los muros, la mampostería del recinto, los ladrillos, la mezcla de arena y cemento, por una estructura de metal que pudiera armarse posteriormente en módulos, para recrear la forma original del recinto. Se tuvo que desmontar toda la estructura que cubría el sótano y construir un galpón para proteger el mural del clima. Se usaron herramientas que efectuaron cortes que seccionaron en seis tramos el mural, y se sacó con una grúa las partes que luego fueron guardadas en contenedores.
Un símbolo actual
El mural consiste en figuras que están nadando alrededor del espectador en ese espacio rectangular abovedado, razón por la cual están tanto en el techo y como en el piso. Los materiales y recursos técnicos aparecen al servicio de la exploración de una nueva propuesta que implica, en sí mismo, una modernidad como acción, que hace que se abarque en la obra la clave de la problemática de esa alta modernidad. Refleja la instancia del arte político, y la pérdida de la autonomía artística se puso bajo cuestionamiento. Por otra parte, se rescata que Siqueiros entró en sintonía con Spilimbergo, Berni, Castagnino y con los estudiantes de Bellas Artes convirtiendo la obra en un paradigma del muralismo no solo por su concepción plástica espacial y por su innovadora técnica que explora una nueva propuesta como pintura dinámica, sino que constituye un verdadero testimonio de la vocación de la integración latinoamericana.
La técnica
La obra tiene una superficie total de unos doscientos metros cuadrados, y Siqueiros realizó el mural utilizando una técnica innovadora, donde combinó materiales y procedimientos antiguos con otros modernos -como el uso de la cámara fotográfica-. Además, el grupo de artistas liderado por Siqueiros hizo en este mural un gran descubrimiento, encontraron la manera de retocar el fresco con silicatos para darle mayor firmeza y durabilidad. Pero lo fundamental y más destacado en la manera de la creación de esta obra es que cambiaron el trabajo individual por el trabajo colectivo.
Fuentes:
Decreto Presidencia de la Nación Nº 1045/2003 y 1382/2007
www.cronista.com
Agencia Nacional de Noticias Telam
Texto: Ferragut Juan Pablo, Septiembre 2010
Actualización: M. Trinidad Muñoz Ibáñez, Diciembre2010
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Es bueno comunicarnos
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23:30
Etiquetas:
ARTISTAS PLÁSTICOS-PINTORES,
NUESTRA HISTORIA
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2 comentarios:
Me gusta mucho este artista plástico. Hace unos años, en el hotel en iguazú donde me hospedé había una obra de este artista y fue ahí cuando lo conoci y me encantó. Espero poder asistir a algúna exposición que hagan en Argentina. Saludos
Hola Rocío, gracias por tu comentario y espero cumplas tu deseo.
Saludos
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