AMÉRICA TODA
I
Después de tantos meses, de cielo, agua y cielo,
acaso un ave de vuelo, buscando tierra firme,
fuera el tímido anuncio de este grandioso suelo,
¡como corriendo el velo, sobre lo impredecible!
II
¡Qué mágica es la vida, misteriosa, inefable!
igual que el mar es grave, misterioso y profundo;
que mapas de otras tierras cargaron en sus naves,
¡y un simple vuelo de ave, les señalaba un mundo!
III
Tres simples carabela, cargadas de aventuras,
la empírica locura de la imponente hazaña;
un sueño en oro y grana y un león por armadura,
¡esa era la figura y el corazón de ESPAÑA!
IV
Y aquí esperaba un mundo, distinto, inmenso, puro,
tan grande que no puedo, copiarse en solo un mapa;
de un polo hasta otro polo, tan alto, tan profundo,
¡aquí esperaba un mundo, AMÉRICA esperaba!
V
Porque América es toda, América es ALASKA,
LOS ESTADOS UNIDOS DEL NORTE, CANADÁ;
las montañas rocosas, las planicies heladas,
las ondulante palmas de las islas HAWAI!
VI
América es la historia de un pueblo milenario,
ese MÉJICO arcano, donde vivió la gloria;
los cactos, las acacias, del suelo mejicano,
la Sierra Madre, el llano, América es historia!
VII
Y el MAR DE LAS ANTILLAS de insólita belleza,
donde naturaleza dio todo su esplendor;
hallamos en el agua, como flores dispersas,
JAMAICA, PUERTO RICO Y CUBA la mayor!
VIII
Y unidas en abrazo de historia y geografía,
con las mismas raíces, sobre la misma tierra;
en ese mar de perlas, eternamente unidas,
HAITÍ y SANTO DOMINGO, son una misma perla!
IX
Después en una muestra de exuberancia y vida,
con las alturas frías y las ardientes costas;
como rindiendo culto al Hacedor, desfilan:
HONDURAS, COSTA RICA, EL SALVADOR y todas,…
X
Allí va NICARAGUA con montes y mesetas,
sufriendo sus volcanes, gozando sus llanuras;
caliente GUTEMALA, de abundantes florestas,
Y PANAMÁ, la puerta del mar a la aventura!
XI
Y aquí está VENEZUELA, de selvas y colosales,
pintada entre zarzales y helechos gigantescos;
que simulan mil manos, ardientes, tropicales,
que retorcidas salen, de ese verdor dantesco!
XII
Luego viene COLOMBIA, selva, ríos y vallas
Y cuidando las calles, como ejército inmenso,
antiguos eucaliptos y una legión de sauce,
¡como renglón gigante de colosales versos!
XIII
PERÚ, tierra del Inca, como su historia grande,
la de profundos valle, quebradas imponentes;
la que se ungió de gloria, sobre el altar del Ande,
¡la que nació gigante, de gigantesca muerte!
XIV
Y sobe el mismo suelo, cual si fuera uno mismo,
entre picos y abismos, historia, raza y tiempo,
la figura imponente del ECUADOR andino,
¡como eterno camino del alma de los vientos!
XV
Y allá en el sur tendida, como alongada faja,
pacífica descansa, quietud de cordillera,
sobre CHILE la gloria del alma de Araucania,
¡los sueños de una raza, indómita y guerrera!
XVI
Y subimos al techo del suelo americano,
tocamos con las manos, las milenarias cumbres;
y al romper el sagrado silencio BOLIVIANO,
¡la voz del altiplano, con nuestra voz se funde!
XVII
Y aquí BRASIL inmenso, pletórico de vida,
las manos extendidas y el vientre vegetal;
y cruzándole el pecho, como sagrada herida,
Amazonas suspira su llanto sobre el mar!
XVIII
Y luego en tropicales arrestos de belleza,
ceñida en su cabeza, corona de azahares,
al son de la Guaranda, se acerca una princesa,
¡PARAGUAY es la esencia de rubios naranjales!
XIX
Y URUGUAY, el pequeño gigante de La Plata,
con voz de tango y alma de antiguos payadores;
porque te siento hermano, será que cuando cantas,
se llena mi garganta de todas tus canciones.
XX
Y aquí en el sur la reina de todo el continente,
corazón y la mente de América Latina;
porque es espada y pluma, guerrera, inteligente,
porque es bella y valiente, ¡la reina es ARGENTINA!
XXI
Por AMÉRICA toda, con la pasión en calma,
con los ojos del alma cubriendo su memoria,
con la mente serena, serena la mirada;
sin que se mengue en nada, por la emoción, la gloria;
rindámosle tributo de merecida palma,
¡a nuestro ayer, a España, al Indio,… a nuestra Historia!
Miguel Ardiles
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